La marcha verde pone en juego el poder de los empresarios
Por José Antonio Pérez Valenzuela (Toñín)*
El poeta caminante
Por José Antonio Pérez Valenzuela (Toñín)*
El poeta caminante
En la producción social de su vida –decía Marx-, los hombres
contraen determinadas relaciones necesarias e independientes de sus voluntades,
relaciones de producción que corresponden a una determinada fase de desarrollo
de sus fuerzas productivas materiales. El conjunto de estas relaciones de
producción forma la estructura económica de esta sociedad, la base real sobre
la que se levanta la superestructura política y jurídica
y a la que
corresponden determinadas formas de conciencias social, que hacen que un
conglomerado social determinado fije posiciones según que algunas
acciones puedan afectar sus intereses de clase.
Es de ahí que se desprende la actitud tomada por el Consejo
Nacional de Hombres de Empresas en torno a la Marcha Verde que se realizó el 16
de julio del año 2017.
Resulta, que la marcha verde ha levantado una consigna en la
dirección de que se detenga la impunidad, para que se puedan combatir los actos
de corrupción, sin embargo los empresarios, que siempre se han movido dentro de
acciones que se pueden catalogar non santa en el manejo de los asuntos que
tienen que ver con la acumulación y acaparamiento de capital, se introdujeron
en este movimiento, con el objetivo de que con el financiamiento pudieran tratar
de influenciar para imponer el camino por el cual debe conducirse el Movimiento
de masas que moviliza la Marcha VERDE, pero le ha resultado difícil, por la
característica del movimiento, en donde la mayoría de sus dirigentes y
componentes son personas de una gran militancia de lucha, que provienen del
pueblo humilde, que han creado conciencia sobre la necesidad de cambiar el
actual sistema cosas, corrupta y corruptora.
El Pueblo reaccionó
Al externar el Consejo Nacional de Hombres y Mujeres de
Empresas la declaración de que: No seguirían financiando ni apoyando la marcha, verde porque dizque sus propósitos se habían desnaturalizados, entonces fue que
el pueblo reacciono en la dirección de buscar mediante colectas entre la
población dominicana, los recursos para realizar su tan anhelada Marcha Verde,
la cual bautizó como la Madre de todas las marchas hechas en el país.
Dicha marcha fue todo un éxito, sin la necesidad de que fuera
financiada por el empresariado y esto nos dice que La Marcha Verde Pone en
juego el poder de los empresarios dominicanos.
De todos es conocido la influencia económica que ejercen los
empresarios a través del financiamiento de los Partidos Políticos del Sistema
corrupto y corruptor, con el objetivo de imponer con su dinero quienes pueden
ganar, desde un simple regidor, diputado, senador, alcalde y hasta el presidente
de la República.
Podemos determinar entonces, que el actual poder político y económico lo ejerce en su plenitud
la clase empresarial, en consonancia con la gran oligarquía y la determinación
de los poderes imperiales.
La Marcha Verde se pierde, cuando hace el llamado a que se
enjuicien a los representantes de este sistema corrupto y corruptor dentro de
la base real sobre la que se levanta la superestructura política y jurídica de
dicho sistema, los bomberos no se pisan la manguera, y los jueces, los
ministerios públicos, responden al mandatos de estos señores y nunca los
enjuiciarían, es más recomendable exigirles en las calles la necesidad de que
se le entregue “Todo el poder al pueblo”, desde donde se han elegidos las
actuales autoridades que le han faltado al juramento de representarlo con
pulcritud desde una función pública, para que desde el poder del pueblo se organice
una consulta a través de una constituyente, con participación y elección popular
que constituya el poder popular, el poder del pueblo.
*El autor es ganador del Premio Internacional de Literatura y Gestor
Cultural en la Región Enriquillo.-
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