Santo Domingo.-El Papa Francisco designó como Administrador Apostólico de la Diócesis de San Pedro de Macorís a monseñor Rafael Felipe Núñez, obispo emérito de Barahona, luego que esta sede episcopal quedará vacante, al ser trasladado el obispo de dicha diócesis, Francisco Ozoria Acosta, a la sede arzobispal de la Arquidiócesis de Santo Domingo.
El decreto de la designación de monseñor Felipe Núñez, que fue leído por el canciller de la Arquidiócesis de Santo Domingo, reverendo Gerardo Ramírez Paniagua, está firmado por el cardenal Marcos Ouellet, prefecto de la Congregación de los Obispos y está fechado en Roma este mismo día 10 de septiembre de 2016.
Mediante el decreto del Papa, a monseñor Felipe Núñez le fueron restituidos todos los derechos, deberes y poderes que corresponden a los obispos diocesanos, de acuerdo a las normas del derecho canónico, conforme al número 244 del Directorio para el Ministerio Pastoral de los Obispos, llamado en latin “Apostulorum Successore”.
Monseñor Felipe Núñez mantuvo esos derechos y poderes mientras fue obispo de Barahona durante 17 años, cargo del que fue relevado el pasado año 2015 luego que él mismo solicitara su retiro al Papa Francisco al arribar entonces a la edad de 75 años.
El obispo Felipe Núñez nació en Villa Tapia, La Vega, en 1938, y fue ordenado sacerdote el 25 de marzo de 1965. Ha desempeñado diversos cargos y funciones pastorales, principalmente en la formación de los sacerdotes, como rector del Seminario San Pío X, de Santiago, y el Pontificio Santo Tomás de Aquino, de Santo Domingo. Fue designado obispo de Barahona por el Papa Juan Pablo II el 7 de diciembre de 1999, y el 22 de enero del 2000 fue ordenado obispo y entronizado como segundo obispo de Barahona.
Tomada del Listín Diario.-
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