Es lo que ha estado pasando desde el viernes 19 en la frontera por Dajabón. El tradicional mercado binacional está funcionando, aparentemente NORMAL. Sin embargo, militares haitianos irrespetan a sus conciudadanos. Les permiten ingresar a suelo dominicano a comprar y vender, pero al regresar, sin ningún alegato ni justificación, les incautan las mercancías y las lanzan al río Masacre.
Es una acción abusiva e insensata. Es, además, una muestra de burla al gobierno dominicano, que en una aparente indiferencia, ha dado una respuesta vía el Ministerio de Relaciones Exteriores, que no puede ser calificada más que de infeliz.
Si hay alguna disposición oficial del gobierno haitiano, para no permitir el paso de productos de este lado, su deber es, como país “civilizado”, informarle los motivos a su par dominicano. Además, tomar en cuenta a los comerciantes haitianos llamándolos a no adquirir los productos dominicanos, si esa es la decisión oficial. Sin embargo, irresponsablemente, aplican una medida unilateral, sin previo aviso ni información adecuada, permitiendo que adquieran los artículos y luego incautándolos y destruyéndolos sin ningún miramiento.
Lo penoso es que para las autoridades dominicanas es como si nada estuviese pasando. Se han limitado a definir como “un hecho aislado” lo que ha estado sucediendo en la frontera por Dajabón.
Es una ofensa a la RD y un abuso en contra de los comerciantes y los consumidores haitianos ¿Dónde están los “defensores” de la causa haitiana, que no dicen esta boca es mía ante esa inhumana actitud?
Esperamos una reacción de las autoridades dominicanas, acorde con la gravedad de esta situación repetitiva. Hay que decir ¡basta ya! a esa afrenta ante el país y ese abuso con los comerciantes de este y aquel lado.
Con esa actitud no se impulsa ni mantiene LA BUENA VECINDAD.
El pasado viernes hubo un acuerdo momentáneo y los productos dominicanos fueron adquiridos otra vez por los haitianos, pero unas relaciones entre países no pueden sustentarse en el capricho de unos funcionarios o un par de comerciantes ambiciosos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La Caracola agradece su disposición de contribuir con sus comentarios positivos, siempre basados en el respeto a los demás y en la ética de la comunicación popular.