17 de abril de 2016

EXPRESIONES

¿Somos un país?
Por Tomás Aquino Méndez
¿Somos un país?Está bien que las elecciones sean observadas por organismos internacionales.
Tampoco veo razones para que se le impida a instituciones nacionales seguir el desarrollo de las votaciones el próximo 15 de mayo.
Entiendo que hubo un tiempo en el que el órgano rector de esos procesos no era confiable.
Sin embargo, creo que hasta el día de hoy, la Junta Central Electoral ha cumplido su protocolo de forma adecuada.
Sin cuestionamientos ni obstáculos.
Siempre he cuestionado que se “invite” a embajadores a observar nuestros procesos electorales. ¿Acaso nuestros embajadores, diseminados por todo el mundo, han observado y cuestionado las elecciones en donde ejercen sus funciones? Definitivamente no.
Porque no es su función ni su derecho. Y mucho menos han intentado, como han pretendido los embajadores de la Unión Europea y de Estados Unidos, meter sus narices hasta el infinito, incluyendo un número inaceptable de “cuidadores” electorales que pretenden meter en cada colegio electoral.
Por eso no entiendo por qué tenemos que ser ‘vigilados’ por todos los diplomáticos acreditados aquí.
Eso que quieren los amos del mundo hacer en nuestro país, no lo aceptan ni en Haití, en donde ellos lo controlan todo.
Es penoso escuchar a políticos de oposición y hasta alegados ‘izquierdistas’, justificar, defender y hasta pedir que gobiernos extranjeros se metan en nuestra forma de escoger a las autoridades gobernantes. Ya está bueno de permitir que nuestra soberanía sea pisoteada.
Pero este rechazo tiene que ser para todos los que desde fuera pretenden violentar nuestros derechos, con o sin el respaldo local. No somos de los que creen que la soberanía está en peligro por la presencia haitiana, como pretenden hacernos creer algunos. Si algún peligro existe, viene de otras latitudes, más poderosas y con tradición intervencionista, que se amparan en sus embajadas para pisotear y meter sus ‘vigilantes’ en cada colegio electoral.
A eso se quiere agregar que observadores locales, que también obedecen a organismos externos, cuenten los votos, dizque para garantizar la pureza del proceso. Aquí existe un solo organismo responsable de preparar elecciones y sólo el debe tener control TOTAL de este proceso.
Ni embajadas, ni entidades sustentadas con fondos externos, tienen que tener potestad de tocar los votos depositados por los ciudadanos el próximo 15 de mayo. ¿O es que acaso no somos un país libre de elegir nuestro destino y organizar nuestros procesos electorales?  

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La Caracola agradece su disposición de contribuir con sus comentarios positivos, siempre basados en el respeto a los demás y en la ética de la comunicación popular.