La Habana, Cuba.- La hija del presidente Raúl Castro, Mariela Castro, aseguró el jueves que
la apertura de una nueva etapa en las relaciones entre Cuba y Estados Unidos no
se traducirá en que la isla vuelva a un sistema capitalista.
“Si en
los Estados Unidos pretenden con estos cambios que Cuba regrese al capitalismo
y regrese a ser un país servil a los intereses hegemónicos de los grupos
económicamente más poderosos de los Estados Unidos,
deben estar soñando”, dijo
Castro a The Associated Press, un día después del anuncio de su padre y del
presidente estadounidense Barack Obama del restablecimiento de relaciones
diplomáticas tras más de medio siglo.
Consideró
que más que un cambio de sistema, la gente en la isla espera que se mejoren los
actuales proyectos impulsados por el gobierno que hoy encabeza su padre.
“Yo puedo apreciar que muchas personas jóvenes se han apropiado con valores de
la Revolución y se sienten comprometidos en una relación de continuidad”,
aseguró la diputada y directora del Centro de Educación Sexual (Cenesex), desde
el cual ha promovido nuevas políticas contra la homofobia y a favor de la
diversidad sexual en el país.
Cuba
fue declarada como una nación socialista en abril de 1961, poco más de tres
meses después de que Estados Unidos rompiera relaciones con la isla y cerrara
su embajada. Dijo que la gente esperaba un momento como el actual,
“porque sabemos que va a cambiar nuestras vidas” y confió en que si se retira
el embargo económico por parte de Estados Unidos podrán obtener recursos
necesarios para financiar proyectos.
“Creo
que esto nos va a dar muchas más herramientas para sacar adelante los proyectos
sociales para seguir fortaleciendo el sistema de salud, los servicios de
educación, espacios deportivos, artísticos, científicos (en los que) tantas
dificultades hemos tenido por el bloqueo”, añadió sobre algunas de las áreas en
las que Cuba ha destacado a nivel mundial en las últimas décadas.
Luego
de que Fidel Castro, tío de Mariela, decidiera en 1960 virar el rumbo de la
isla hacia la izquierda y comenzara a nacionalizar empresas estadounidenses, el
gobierno de Estados Unidos estableció las primeras prohibiciones -a las
exportaciones, por ejemplo- que luego derivaron en un embargo a casi todos los
productos cubanos.
Raúl
Castro y Obama dieron el miércoles un giro histórico a las relaciones
bilaterales con el anuncio de la normalización diplomática y medidas como la
liberación de tres agentes cubanos presos en Estados Unidos y considerados
héroes en Cuba, y la entrega a esa nación del contratista estadounidense Alan
Gross, preso condenado hace cinco años por traer ilegalmente equipos de
telecomunicaciones e intentar colocar ilegalmente redes de internet.
Y
aunque Obama dijo que el aislamiento a la isla no ha funcionado en más de 50
años, el fin del embargo no es una facultad presidencial, sino que debe ser
aprobado por el Congreso, cuyos legisladores no tienen una voz coincidente en
el tema. Para Castro, sin embargo, Obama sí podría modificar
la aplicación del embargo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La Caracola agradece su disposición de contribuir con sus comentarios positivos, siempre basados en el respeto a los demás y en la ética de la comunicación popular.