Los Sentimientos y la Razón

Por Clemente Terrero 

La razón es la facultad que tienen los seres humano de pensar, reflexionar para elaborar juicios sobre una cosa dada. Es la manera de concebir la realidad, en su forma, en su contenido y en su estado relativo. La realidad puede ser objetiva y subjetiva.

La realidad objetiva es aquella que existe fuera del sujeto, mientras que la realidad subjetiva es la que existe dentro del sujeto, en su mente y en sus pensamientos.

Se conoce como subjetividad lo que es propio de la imaginación. En las discusiones teóricas se suele decir, "su planteamiento es subjetivo".

El concepto subjetividad se refiere a una la idea que es creada por la mente, la cual puede ser falsa.

Sin embrago, la realidad objetiva puede ser abstraída por la mente del sujeto, es a lo que en la filosofía del pensamiento se denomina objetividad, cuando el individuo concibe la realidad exactamente como existe fuera de sí. La abstracción de la realidad concreta de forma cuasi perfecta, por medio de una valoración racional.

Pero, volviendo al tema inicial de la exposición, vemos que, los sentimientos no tienen su origen en la razón, sino que son la expresión de lo que una persona siente de acuerdo al estímulo que su sistema sensorial ha percibido desde el exterior, es una emoción que se expresa en el estado de ánimo del individuo.

Los sentimientos son una reacción provocada por un determinado impulso que se manifiesta de diversas maneras, de acuerdo a como el organismo lo perciba. Esas sensaciones las personas las puede imaginar como positivas o negativas. Por eso, hay diferentes tipos de sentimientos, de felicidad y alegría, como de tristeza y dolor.

Los sentimientos, siempre serán subjetivos, por no proviene de la razón. En base a esto, existe el riesgo de que las decisiones tomadas a priori, producto de los sentimientos podría ser equivocadas, porque carecen de objetividad y de razonamiento lógico.

Un elemento que hay que tener en cuenta es que los sentimientos son más fuerte que la razón, por demás, los seres humanos somos muy sensitivos. Debido a esto, la mayoría de las ocasiones actuamos por sensaciones y no por reflexiones. Las acciones inmediatas generalmente provienen de los sentimientos. De primera intención son acciones irracionales.

De acuerdo a ese razonamiento, podemos concluir que los sentimientos nublan la razón, produciendo fallos en la percepción de la realidad y que actuemos de forma irracional. Acción que a la larga va en contra de las propias convicciones, produciendo situaciones adversas, desagradables y perjudiciales.

Es aconsejable entonces que, cuando se vaya a tomar una decisión, se valore antes de actuar, estar seguro de si la postura es producto de la razón o la imaginación. La razón suele llevarte por buen camino, mientras que la imaginación te puede llevar al fracaso.

Piensa bien antes de actuar, no te dejes llevar por los sentimientos. Los sentimientos suelen ser malos consejeros a la hora de actuar y, hacerte fracasar. Éstos pueden debilitarte, como le pasó a Sansón, cuando por su amor a Dalila, permitió que ella lo traicionara, le quitara su poder, para que sus enemigos pudieran vencerlo.