“Dime con quién andas y te diré quién eres”, dice
un reconocido refrán popular. Trasladando este refrán a nuestra
sociedad, pudiésemos decir, que como marchan el transporte, la salud y la
educación, así marcha nuestro país. Esta semana, el Colegio Médico Dominicano volvió a parar los servicios en los hospitales públicos. Nuevamente, miles de humildes dominicanos quedaron sin servicios. A eso, ya estamos acostumbrados. Lo que me llama la atención y donde
veo una muestra de gran DEBILIDAD gubernamental, es que mientras los médicos del colegio abandonaban sus labores, el Ministerio de Defensa ordenó a los médicos militares ofrecer sus servicios. Pero la dirección del colegio demostró más fuerza que el ministro de defensa y las autoridades de salud. Y esos médicos militares no pudieron atender a los pacientes pobres, porque los dirigentes del colegio se lo impidieron. Al menos en el Dario Contreras y el Moscoso Puello. INACEPTABLE! que los médicos que querían trabajar fuesen sacados de los consultorios por los médicos civiles.
Pero ese mismo esquema se repite en el sector Educativo. La Asociación Dominicana de Profesores ha demostrado tener más fortaleza que las autoridades. Cuando el ministro de educación llama a las aulas, la ADP pide a sus miembros abandonarlas y se cumple lo que ordena el gremio de los profesores. Cuando el ministro dice que no se permitirá que los maestros comprometan más del 40 por ciento del salario de los profesores, la ADP lo descalifica y al final impone su criterio. Por eso tenemos hoy educadores a los que se les descuenta hasta el 100% del salario que percibe. A cada maestro se le descuentan 200 pesos por derecho a ser miembro de la ADP y eso deja en manos de la dirigencia millones de pesos cada mes. Nadie, ni los educadores, sabe que se hace con esos fondos.
En el área del transporte, el drama no es menos impactante. Lo que sucedió esta semana en una ruta de la John F. Kennedy es solo una nuestra. Un pleito con armas blancas, por el control de una ruta, dejó a un chofer sin una mano, por el ataque salvaje de su “compañero”. Mientras los dirigentes del transporte extorsionan al Gobierno para recibir beneficios y la población sigue sufriendo un servicio deficiente.
Es decir, los médicos, profesores y choferes, han demostrado tener el control ABSOLUTO de esas áreas claves para el desarrollo del país. El gobierno ha demostrado incapacidad para hacer que esos servicios, fundamentales para el desarrollo de la nación, no sean usados por esos gremios para chantajear y recibir beneficios particulares.
El gobierno es responsable de garantizar salud, educación y transporte a la ciudadanía. Si para eso debe usar a los militares o los servidores públicos, entonces debe hacer valer el poder otorgado por los votantes a la hora de recibir el respaldo en las urnas.
Si las autoridades de un país no pueden hacer eficientes los servicios de salud, educación y transporte, es imposible garantizar el desarrollo de esa nación y por lo que estamos viendo, al Gobierno los gremios le están tumbado el pulso.
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