Por Emilia Pereyra (Diario Libre)
Aunque
constituían un ejército novato, las tropas comandadas por el general Pedro
Santana vencieron de forma contundente a las milicias haitianas, dirigidas por
el presidente Charles Hérard Ainé, el 19 de marzo de 1844, en la primera gran
batalla que defendió la Independencia Nacional, proclamada en Santo Domingo.
Según “El
diario de la independencia”, del historiador Adriano Miguel Tejada, el lunes 18
de marzo, un mensajero enviado por el patriota Jaime Vidal, quien se trasladó
desde El Maniel, le informó al general Santana, comandante en jefe de los
ejércitos expedicionarios, sobre los movimientos que hacían las tropas haitianas
que invadían el territorio dominicano.
El
general Santana preparó las tropas al amanecer y formó una línea defensiva
desde el camino del Barro, en el noroeste, hasta el trayecto de Los Conucos, en
el suroeste.
“En el
flanco derecho, Santana emplazó a los fusileros azuanos, comandados por
Valentín Alcántara y Vicente Noble, y un contingente de macheteros entrenados
por el coronel Antonio Duvergé. En la retaguardia de este flanco estaba Nicolás
Mañón, con 200 hombres en el cerro de Resolí, en Azua”, relató Tejeda.
El
historiador y periodista contó además que, “a la izquierda, había emplazada
otra pieza de artillería y los fusileros de Matías de Vargas, José Leger y Feliciano
Martínez”. En las refriegas, los haitianos fueron vencidos, y Hérard Ainé se
retiró a orillas del río Jura para reorganizar sus huestes.
Las bajas
Los
haitianos perdieron entre 200 y 300 hombres, mientras que las bajas dominicanas
fueron insignificantes.
Pese a la
contundente derrota sufrida en tierras azuanas, a manos de los criollos, los
extranjeros se prepararon y volvieron a atacar el 30 de marzo de 1844, en
Santiago de los Caballeros, donde de nuevo fueron abatidos.
A la
sazón, las tropas, al mando del general José María Imbert, resistieron cinco
ataques, por dos flancos, en los que los invasores tuvieron unas 600 bajas y
una mayor cantidad de heridos, mientras los nacionales no sufrieron pérdidas.
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