Pedro Caba pondera "Azúcar, cayo y Puerto", la epopeya del Batey Central Barahona
Querida sobrina Cristinita:
Cuando creía que no existían brazos y, por tanto, hombres y mujeres
que labraran la tierra para el cultivo de la caña, pues han sido
sustituidos por gigantescas máquinas de siembra, cortadoras y alzadoras
mecánicas, tu cálido envío de “azúcar, cayo y puerto” (la epopeya del
Batey Central Barahona) me convenció que los ancestros son imborrables.
Que siempre habrá almas sensibles que jamás olvidan su origen, y el
legado cultural y de vida que esa entremezcla de nacionalidades
caribeñas hicieron posible el nacimiento del ingenio.
El bateyero Juan Matos extrae tiempo desde su placentera academia de
Worcester, Estados Unidos, y nos recuerda con vividas imágenes ese
entorno que lo vio nacer y que fraguó hombres cargados de heroicidad,
como José Mesón.
Gracias,
Pedro Caba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La Caracola agradece su disposición de contribuir con sus comentarios positivos, siempre basados en el respeto a los demás y en la ética de la comunicación popular.