2 de noviembre de 2017

MI REFLEXIÓN MATUTINA

El amor de madre

Por Leo Mercedes

Resultado de imagen para leonardo mercedesComo las madres con sus hijos, no hay otro ser humano en la bolita del mundo. El sentimiento materno es lo más puro, supremo y perfecto entre todos los sentimientos. Es de origen material y espiritual a la vez.

Nada puede ser más grande que sentir que dentro de ti ha surgido una vida fruto de un acto de amor, llevarlo, sentirlo y cuidarlo durante
nueve meses, luego el dolor de parirlo, verlo nacer, amamantarlo, protegerlo, oirlo hablar, criarlo, verlo caminar, correr, jugar, leer, cantar, bailar, crecer y transformarse, eso tiene que ser lo más extraordinario, emocionante y dulce que puede existir.

Definir lo que es una madre, no puede caber en un cerebro, ni las palabras de ningún idioma alcanzar para poderlo decir o escribir.

Y todo eso deben comprenderlo, asimilarlo, respetarlo y saberlo llevar las esposas y las novias. Oponérsele, hacerle competencia, pretender romperlo, es sólo una necedad y estupidez mayúscula, que a nada bueno puede conducir.

Piendo que lo que más se le acerca, pero todavía a muy larga distancia, es el amor paterno de los padres excelentes, "de verdad", los que fueron partícipes del acto de amor que aportó el otro componente de la concepción, los que comparten con las madres todo el proceso de gestación, alumbramiento, cuido y crianza, convertidos con ellas en una unidad; contribuyen a que ésta resulte un oasis de alegría, paz y felicidad, superando las adversidades naturales y sociales presentes y, junto con la madre y los buenos hijos, construyen la organización fundamental y originaria sobre la que debe descansar y construirse toda sociedad: La Familia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La Caracola agradece su disposición de contribuir con sus comentarios positivos, siempre basados en el respeto a los demás y en la ética de la comunicación popular.