Puede que de verdad, como me dijo un amigo funcionario, los hombres y mujeres del Sur nos estamos desesperando. Me dijo que debemos confiar en que lo prometido será cumplido.
¿Desesperando? Esta región lleva años esperando que la mano “generosa” del Gobierno ejecute las inversiones que necesitamos para que llegue el anhelado desarrollo. Promesas van y promesas vienen y seguimos siendo la “cenicienta” del país.
Ese día, el mandatario dijo que se pondría en marcha el nuevo polo turístico, ecológico y sostenible de Bahía de las Águilas en Pedernales.
“Ya contamos con un plan de ordenamiento territorial turístico, elaborado por los ministerios de Turismo y de Medio Ambiente, con el asesoramiento de expertos internacionales”, dijo en esa ocasión nuestro presidente.
Estamos en el 2017 y aún no vemos el primer paso para cumplir esa promesa.
Creímos que, con ese anuncio, llegaría a esta zona el tan anhelado desarrollo turístico y económico que hemos esperado.
Pero no solo se ha engavetado Bahía de las Águilas, también sigue durmiendo en algún escritorio del Palacio Nacional el proyecto Monte Grande, “el Metro del Sur”, como lo hemos bautizado.
Una ceremonia en el mismo lugar donde se levantará la principal estructura de esa obra, llevó esperanza a los suroestanos.
Allí se anunció que para el 2016 Monte Grande estaría siendo inaugurada. Estamos en el 2017 y la obra aún no se inicia “formalmente”, aunque algunas pequeñas obras colaterales han sido ejecutadas.
Con la proclama de que había llegado “la hora del sur”, creímos que las carreteras, caminos vecinales, centros educativos, facilidades financieras para productores, llegarían sin más dilación.
..¡qué ilusos! En fin, creímos que con un hombre del Sur al timón de la nación, “otro gallo cantaría” .
Pasó el primer período, va en camino el segundo y sigue cantando el mismo gallo, con anuncios y promesas que aún esperamos sean cumplidos.
Por el Día Mundial de la Tierra, el pasado sábado fue celebrado un emotivo acto en Pedernales.
La iglesia Católica, Grupo Jaragua, funcionarios y comunitarios, expresaron su anhelo de que despegue el turismo en la zona. También insistieron en la protección y cuidado del medio ambiente y la Madre Tierra.
Falta que desde el poder nos ofrezcan “el mismo cariño”.
A pesar de que algunos creen que estamos perdiendo la fe, no es así, aunque después de los tantos anuncios y viendo la inactividad, le preguntamos a nuestro presidente Danilo Medina, en el lenguaje que utilizan los jóvenes de este tiempo...
Señor presidente, ¿y la Hora del Sur…pa’ cuándo?
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