Por Alejandro Santana
Al Ministro de
Defensa, Teniente General, Máximo W.Muñóz Delgado:
Es justo que usted se entere
que en esta Provincia de Barahona, hay un sub oficial del ERD, enfermo, sin
dolientes, por el cual no han dejado acercarse a sus superiores para solicitar
asistencia médica y social.
Rafael Aristy, el Cantinflas Barahonero, ingresó a las filas como
maestro de ceremonias en la sede de la 5ta Brigada del ERD, durante muchos años se
desempeño con profesionalismo en esa actividad.
Su salud ha ido en deterioro constante, y actualmente, junto a
su precaria situación económica y junto a la afección cerebro vascular,
está enfermo de cáncer de próstata.
Para su desgracia, mantiene empeñado el salario que devenga, pues
tiene que estar tomando dinero prestado a prestamistas para comprar
medicamentos para sus males.
En la actualidad no es diferente a cualquier indigente, tiene que
estar tocando las puertas de funcionarios, de políticos y amigos, que unas
veces le resuelven y otras lo ponen a dar vueltas, se burlan de él.
En el rango ya tiene más de nueve años y a la hora de los ascensos no han mirado para donde él, pese a que hablamos de escalafón
automático. (Un cuento chino).
El Cantinflas, hace tiempo que con la ayuda de amigos comenzó a
levantar una casita en lo más apartado de la ciudad, en el sector Los
Posimanes, más arriba de la cabecera del rio Birán.
Allí su casita está a medio construir, sus condiciones económicas
no le han permitido terminarla, ha tenido que estar dando tumbos en
diferentes barrios donde la inseguridad es notoria y marcada.
Hasta ahora, en los lugares que ha podido alquilar una guarida le
han robado sus pertenencias, los amigos lo ayudan a reponer lo que le roban, se
muda de ese lugar pero vuelve a caer en los peores sitios fruto de sus
precariedades.
Como es un soldado, enfermo, sin apellido sonoro, sin padrinos, le
ha sido imposible llegar a las altas instancias de la Institución a clamar
ayuda, cuando han venido a la ciudad los superiores del ERD, no le han
permitido llegar hasta donde ellos.
Recientemente logró hablar con un legislador reeleccionista de la
Provincia para que lo ayude a realizar diligencias encaminadas a que lo
pensionen y pese a que le dijo que fuera a su vivienda, todo ha sido una burla.
Debe viajar todos los meses a la capital a
recibir quimioterapia a un centro médico que no es el de la Institución, donde
tiene que pagar una cuota.
Las veces que ha podido viajar a recibir la quimioterapia, lo ha
hecho porque el Gobernador de la Provincia le ha dado la ayuda de lugar, pero
no siempre es fácil verlo, pues se mantiene viajando en diligencias propias
de sus responsabilidades.
Sus esperanzas siguen cifradas en el señor
Gobernador Provincial, y en diligencias que el comunicador Osvaldo Rocha,
residente en los Estados Unidos y que tiene un medio digital llamado Osvaldo
Rocha Internacional, le está haciendo entre Barahoneros residentes en esa urbe.
Que un ser humano, un ciudadano, un profesional cualquiera, tenga
que sobrevivir por la caridad de los demás, no es sorprendente, debido a nuestro
precario sistema de seguridad en Salud.
Pero que un Soldado que dedicó más de 15 años a servir a una
Institución como el ERD, como que no encaja y se puede calificar como un
abandono y una vergüenza en contra de quien debe ser tratado con dignidad por
sus superiores.
Señor Ministro de Defensa del ERD, el sargento mayor Rafael
Aristy, el Cantinflas Barahonero, necesita de la solidaridad de la Institución,
que no se espere que muera para enterrarlo con honores, sus necesidades
son ahora, por eso este S.O.S.
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