Por Wellington A Pérez
Cabral, Barahona.- Pese a ser bautizada como la capital de las aguas, esta comunidad pasa una sequía extensa. Como si fuera una penitencia, la gente
de aquí tiene que trasladarse a los distintos ríos de la comunidad para obtener
agua de muy mala calidad.
Desde la
puesta en funcionamiento del acueducto del suroeste (ASURO), las cosas
están de
mal en peor para las comunidades adyacentes al rio Yaque del Sur. Antes tenían
mejor servicio de los acueductos, alimentados por electro- bombas, que
medianamente suplían las necesidades de agua de los pueblos, pero al ser cambiado
por el Instituto Nacional de Aguas Potable y Alcantarillado (INAPA) este sistema, sustituido por ASURO, la cosa es
peor.
La Peñuela, sector
más habitado del municipio en cuestión, es uno de los sectores más golpeado por
la falta del vital líquido, la gente de allí no encuentra que hacer con la
escasez de agua que se produce por semanas, trastornando así la cotidianidad de
los residente en la barriada.
Desde que el
INAPA desmanteló las electro-bombas que servían para alimentar el viejo
acueducto, los peñueleros la ven pasar muy fea y tienen que almacenar agua en
tanques, exponiendo su salud por el riesgo epidemiológico que conlleva almacenar
agua en la actualidad, por lo que piden de las autoridades devolver las
máquinas para el bombeo de las aguas en los pozos alimentadores del viejo
acueducto, para recibir mejor servicio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
La Caracola agradece su disposición de contribuir con sus comentarios positivos, siempre basados en el respeto a los demás y en la ética de la comunicación popular.