Bogotá.-El presidente de Colombia, Juan
Manuel Santos, anunció este domingo la suspensión de las conversaciones de paz
que su gobierno sostiene desde hace dos años con las Fuerzas Armadas
Revolucionarias de Colombia (FARC).
La medida fue tomada por el
mandatario luego de que miembros de esa organzación guerrillera capturaran al
general del ejército colombiano Rubén Darío Alzate, junto a dos de sus
acompañantes, en el departamento de Chocó.
"Mañana viajaban los
negociadores de paz a una nueva ronda de negociaciones en La Habana. Les voy a
decir a los negociadores que no viajen y que se supende esta negociación hasta
tanto (la situación) no se aclare y se liberen estas personas", dijo
Santos.
"Ya sabemos que (las FARC)
fueron los responsables de este secuestro. Un secuestro totalmente
inaceptable", aseguró el presidente en declaraciones brindadas poco antes
de la medianoche.
"Responsabilizamos a las FARC de
la vida y la seguridad de estas tres personas y les exigimos que liberen a
estar tres personas cuanto antes", agregó.
Operativo
de rescate
El gobierno puso en marcha el lunes
un operativo de rescate.
"Le he dado instrucciones a
Ministro de Defensa para que se traslade al Choco y personalmente asuma
investigación sobre secuestro de BG Alzate", informó Santos a través de su
cuenta de la red social Twitter.
El general Alzate es comandante de la
Fuerza de Tarea "Titán", que opera en el departamento de Chocó, en el
noroccidente del país.
Fue capturado junto a un cabo y una
funcionaria del Ministerio de Defensa mientras visitaba un caserío de la zona,
vestido de civil.
"El incidente no podía llegar en
peor momento para el gobierno, pues se produce justo cuando gobierno y FARC se
aprestaban a conmemorar dos años del inicio de las conversaciones en La Habana
en medio de críticas por la lenta marcha del proceso", explicó el
corresponsal de BBC Mundo en Colombia, Arturo Wallace.
Wallace recordó, además, que antes de
dar inicio a las conversaciones las FARC se comprometieron a dejar de secuestrar
civiles con fines de extorsión.
"Y aunque los rebeldes siempre
han defendido su derecho a retener a los militares colombianos, a los que
consideran prisioneros de guerra, la captura del militar -el de más alto rango
en los 50 años de conflicto- y sus acompañantes seguramente será considerada
como inaceptable por la inmensa mayoría de los colombianos", dijo Wallace.
Fuente: BBCMundo.-
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