6 de agosto de 2017

EXPRESIONES

Llover sobre mojado
Por Tomás Aquino Méndez
Llover sobre mojado
Probablemente muchos de ustedes coincidirán conmigo al leer estas Expresiones. Es que ustedes, como yo, entienden que un presidente, un ministro o un alcalde, al asumir su posición, lo primero que tienen que hacer es revisar los compromisos y las obras dejadas en proceso por la persona a quien van a sustituir. Es lo que se llama continuidad del estado. 
Nada justifica que obras construidas en pasadas administraciones no reciban el mantenimiento requerido para que preserven su total esplendor.
Mucho menos se justifica que obras iniciadas no sean concluidas. Es cierto que al llegar a un cargo la persona lleva su programa de obras y quisiera terminarlas. 
Es inaceptable, por ejemplo, que el dinero invertido en el parque Eugenio María de Hostos, en los parques canquiña, en el circuito bici, en el denominado Zooberto, por citar algunas obras de la ciudad, no reciban el cuidado, iluminación y mantenimiento necesarios. Como tampoco se justifica que las líneas 2 y 3 del Metro, el hospital general de la ciudad de la salud doctor Ney Arias Lora, la presa Monte Grande, obras claves de la pasada administración, no reciban la atención e inversión requeridas. Y que no me digan que es falta de recursos. 
Tampoco quiero decir que la iluminación del ensanche La fe o el Mirador Sur; así como la construcción de escuelas y el teleférico de la ciudad, no sean importantes, lo son. Y qué bien que para ellas ha habido dinero. 
Con una correcta planificación se pueden concluir obras iniciadas en pasadas gestiones, dar mantenimiento a las ya existentes e iniciar otras para que el nuevo incumbente deje su impronta y satisfaga su EGO. Creo que no ayuda al alcalde de la ciudad, que mientras él ilumina el ensanche La Fe, el emblemático sector de Gazcue estaba a oscuras y recibía 12 interrupciones del servicio energético en menos de 24 horas. Como tampoco favorece al gobierno central, que el ciudadano sufra la deficiencia del servicio que brinda el Metro, mientras se invierten cientos de millones en un teleférico, descuidando las líneas existentes e ignorando el reclamo de llevarlo a otros puntos claves de la ciudad. Quiérase o no, en ambos casos pareciera que es por no continuar lo dejado por la persona sustituida. 
Ojala no se repitan casos como los proyectos Invivienda Santo Domingo y Santiago, y cantidades de escuelas, clínicas y acueductos iniciados en distintas administraciones y dejadas a medio concluir, desperdiciando millones de pesos aportados por el pueblo dominicano, no por un presidente, alcalde o funcionario en particular.

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