Quiero Ver a Martha

Por Bienvenido Heredia

No por el apellido, igual que el mío.

No porque me gusta como canta.

No porque tiene dotes de artista.

No porque ganó el American Idol en el 2009

Nada de eso.

Quiero ver a Martha Heredia en la calle, porque otros, con mayores culpas que ella, con mayores cargos que ella, habiendo cometido un delito, o varios, de mayor magnitud que ella, hace rato que están en la calle. Y quizás recibiendo el saludo reverente de sus compueblanos y, quién sabe, si hasta de autoridades y empresarios.

La artista, la jovencita que ganó fama internacional con apenas 18 años, fue apresada con 3.9 libras de heroína en unos tacos de zapatos, cuando se disponía a viajar a Estados Unidos. Violó la Ley 50-88 sobre el tráfico ilícito de drogas, sus modificaciones y sus reglamentos. Fue usada como MULA (la ley no tipifica como MULA ningún caso de violación a la misma).

La condenaron a siete (7) años de cárcel, y aunque lleva más de cuatro tras las rejas, ningún juez ha querido darle la libertad condicional que manda la ley cuando se ha cumplido la mitad o más de la condena impuesta. (Aunque, honestamente no sé en qué momento ni cual ley modificó el artículo 87 de la 50-88, el cual establece que en ningún caso, los imputados de violar dicha ley tendrán derecho a libertad bajo fianza, condicional, ni perdón condicional de la pena. Pero muchos han recibido ese beneficio).

Pero qué pasa. Mientras Martha está presa, con el supuesto beneficio del programa “medio libre” (dos días en su casa y cinco en la cárcel), Quirino Ernesto Paulino Castillo (El Don), apresado y extraditado hacia Estados Unidos por haber intentado exportar 1,387 KILOS de cocaína,  (3,012 libras más que Martha) está en la calle y, tal vez, disfrutando de los bienes adquiridos con ese “negocio”. Fue apresado en el 2004 y extraditado en el 2009. Cinco años después, en el 1914, estaba de regreso al país.

Algo similar, o peor, pasó con Ramón Antonio del Rosario Puente (Toño Leña), apresado y extraditado hacia Puerto Rico en el 2010, acusado de” tráfico de estupefacientes, asesinatos, robos y asaltos, violaciones sexuales y secuestros, entre otros delitos”. Regresó libre a República Dominicana, cinco años después, en agosto del 2015.

Y comparando el caso de la joven artista con algo similar, lo sucedido con otro joven artista, Jimmy Bauer, ella sigue presa, mientras Bauer, apresado con un kilo de cocaína en el estómago, fue condenado a 6 años de prisión y, al cumplir tres años, un mes y 21 días, fue dejado libre. ¿Se portó bien?, ¡Excelente! Y Martha, se ha portado mal? No! Creo que ella, como Bauer, fue víctima de su desorientación y desesperación por verse en una situación difícil en el mundo del espectáculo nacional. Nada justifica que se dejen embaucar de criminales, pero la depresión que sufrieron y la encerrona en que se vieron envueltos, también son atenuantes en los procesos judiciales.

¿Por qué, entonces, la justicia, y hasta el Ministerio Público, se han ensañado contra ella, y no la dejan salir y volar hacia sus sueños de artista, de una potencial excelente buena artista dominicana?

Por eso, quiero ver a Martha Heredia en la calle, quiero verla exhibir su talento en los escenarios de mi país, y además, porque no he visto ni veo la razón para tanto ensañamiento en su contra.